El aceite de oliva virgen extra cosecha temprana Molea Olearia es la joya de la corona de nuestros aceites.

Se denomina cosecha temprana al aceite que se obtiene cuando el fruto aún no ha madurado completamente y la aceituna todavía está verde. Esta circunstancia, no es un inconveniente para su sabor como ocurre en otros frutos. Sino que potencia enormemente las cualidades organolépticas del aceite. De esta forma se obtiene un zumo de oliva mucho más intenso y fresco.

El resultado es un aceite gourmet, solo apto para consumir en crudo aderezando y potenciando el sabor de múltiples alimentos.

Es el aceite que utilizamos para acudir a los distintos certámenes y concursos de aceite de oliva en los que participamos. Es el aceite más cuidado y de mayor calidad que producimos.

El aceite de oliva virgen extra Molea Olearia es producto de la fusión de dos variedades de aceituna. En primer lugar, la hojiblanca, que proporciona un sabor más potente y con cierto amargor. Por otro lado, la picuda, variedad autóctona de nuestra zona de Priego de Córdoba y que aporta un sabor dulce y delicado que lo hacen diferente a cualquier aceite de oliva. La mezcla de ambas aceitunas produce este aceite perfectamente equilibrado entre el amargor de la hojiblanca y la dulzura de la picuda.

La recolección de las aceitunas que se emplean para la elaboración de este aceite es sumamente cuidadosa. Evitamos que sufran el más mínimo daño en su recolección y transporte a la almazara, por lo que se hace tan pronto como son recogidas.

Realmente, la elaboración de este tipo de aceite supone un gran esfuerzo, tanto físico como económico para los agricultores de nuestra cooperativa. No solo es más compleja su recolección, también la aceituna tiene menor rendimiento.

¿Qué es el rendimiento de la aceituna?

Llamamos rendimiento de la aceituna a la cantidad de kilos que se necesita para producir un litro de aceite.

Se mide en tanto por ciento, siendo el de la aceituna verde en torno al 18%, es decir, de cada 100 kilos de aceituna se obtienen 18 litros de aceite. En cambio, el rendimiento de una aceituna madura se acerca al 25%.

La aceituna, al encontrarse todavía verde, está lejos de su punto de maduración óptimo para conseguir la mayor cantidad de aceite por cada kilo. Es por ello, que los agricultores, para obtener este preciado aceite, tienen que sacrificar muchos kilos de sus aceitunas sin obtener el rendimiento que podrían alcanzar dejándolas madurar más tiempo.  Esto dice mucho de su implicación por obtener el mejor aceite posible, sacrificando cantidad por calidad, lo que en muchas ocasiones no se ve recompensado económicamente.

Uno de los objetivos de este post, es dar a conocer el esfuerzo que supone poner a disposición del consumidor un aceite de esta calidad, y lo difícil que resulta luchar con las grandes compañías aceiteras para las pequeñas cooperativas como la nuestra.

Animamos por ello a nuestros lectores a que consuman aceite de oliva virgen extra de cooperativa. Pese a ser un poco más caro que el que pueden encontrar en las grandes superficies, ofrece indudables ventajas en cuanto a la calidad del producto. Además, ayuda al sostenimiento de los entornos rurales, de su ecosistema y su economía.

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